Zona de Fortuna Absoluta
Y llegó el momento en el que que
cada pieza tomó su lugar, guiada no por su voluntad, aunque
aparentemente así lo creían, sino por la Máquina de Alteración del
Destino, ideada por el misterioso déspota Lord Dornkik. El Dragón Blanco
Escaflowne, su jinete Van, el dragón negro Folken, hermano de Van, y la
joven de la Luna Mística. Todos y cada uno llegaron a ocupar su lugar
debido al Deseo de Dornkik. Él sabía las debilidades y anhelos de cada
uno y aprovecho ese conocimiento para manipular las partículas del
Destino y hacer su Deseo realidad. Todo estuvo puesto: Folken deseando
redimirse a través de matar a Dornkirk, Van deseando proteger a la Joven
y salvar a su hermano, y la Joven sin saber realmente qué desea ni por
qué a vuelto a Gaia. Todo esto es sabido por Dornkirk. Él llevará a sus
ejércitos a conquistar el mundo, pero ese no es su verdadero objetivo.
Desatar una guerra era sólo un pretexto para llevar las pasiones al
paroxismo y que los deseos elevaran su energía al máximo, energía
necesaria para hacer funcionar la Máquina de Alteración del Destino.
Y todo sucede como lo tenía
previsto Lord Dornkirk. Folken y la Joven, en aras de detener la guerra
(para salvar a Van, quien combate en ella, y que lo hace para proteger a
la Joven) se enfrentan cara a cara a Dornkirk. Éste reta y provoca la
ira de Folken haciendo que se lance sobre él y efectivamente lo mata.
Pero la espada de Folken se quiebra tras la estocada y el pedazo rebota y
se le clava en el pecho. Folken cae al suelo y justo antes de morir se
percata que por ese acto la Máquina de Alteración del Destino ha
alcanzado un punto de No Retorno y el clímax de su energía, pues tanto
la Joven como Van tienen una explosión de emociones ante la muerte del
Dragón Negro, las cuales alimentan la Máquina y el espíritu de Dornkirk
se materializa justo para decirle a la Joven eso y que está a punto de
realizarse el Deseo de aquel: la Zona de Fortuna Absoluta.
El sueño de Dornkirk es que
todos puedan cumplir sus deseos, de modo tal que se alcance con ello una
Felicidad Perfecta para todos. Eso es la Zona de Fortuna Absoluta. O
eso esperaba él, porque en el momento en que la Máquina de Alteración
del Destino despliega la Zona de Fortuna Absoluta, la guerra se torna
apocalíptica, pues todos desean vencer a todos y todas las alianzas se
rompen.
Ahí, la Joven de la Luna
Mística, se dará cuenta de algo fundamental: quiere salvar a Van y lo
quiere salvar porque lo ama. Puesto que hasta ese momento sus razones
para detener la guerra habían estado motivadas por la Máquina de
Alteración del Destino, que cambiaba el de todos según los planes de
Dornkirk. Ahí, cuando Van está a punto de matar a su amigo y mentor, la
Joven, Hitomi, acepta su Verdadero Deseo, que es Amar y su energía es
tal que logra llamar a Van desde la distancia y este acude para acabar
con la Máquina de Alteración del Destino y con la Zona de Fortuna
Absoluta, justo antes de que se destruya el mundo.
La Zona de Fortuna Absoluta es
una forma de predeterminar y terminar el Destino de todos, de acabar de
una vez y para siempre con la ansiedad y el miedo que provocan los
deseos, suponiendo que al cumplirlos todos la Felicidad será Perfecta,
cuando, de suceder esto, sería la ruina del mundo pues no habría más
energía para seguir viviendo. Dornkirk, ciego de ambición y de amargura y
de miedo a la vida, quiso dominarla desde su misma Fuente, los deseos y
sólo vió una parte de los mismos, pero no vió que los deseos son la
Fuente de todo Amor, toda Fe y toda Esperanza. Que si se predetermina el
Destino se acaba con la Libertad y sin ella no habría Historia que
contar. De este modo, el genuino deseo de Amar, creó un nuevo Destino
escogido en Libertad y que por lo tanto es Uno, pero puede Cambiar.
Nada hay más desafortunado entonces que una Zona de Fortuna Absoluta.
Alejandro de Andúnië.
A partir de la serie de animé La Visión de Escaflowne.
Comentarios
En efecto, cuando todo se cumple fácil, sin esfuerzo, rápido, es el propio infierno, no se puede gozar de felicidad sin haber sufrido para alcanzarla, pues no sabrías diferenciar qué es felicidad solo porque te hace sentir bien de no existir lo contrario que te haga sentir mal.
Un mundo dónde todo es paz, armonía, felicidad, no tendría antónimo de vida que le diera significado, finalmente la felicidad absoluta es el propio infierno.